Unas 300 personas se han reunido esta mañana en el refugio de montaña de Góriz, en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, para celebrar el fin de la última fase de rehabilitación, tras finalizar un proceso de trabajos que se ha alargado durante 18 años. La Federación Aragonesa de Montañismo, titular del edificio, ha aprovechado este acto para reconocer, con la entrega de platos conmemorativos, a todos los que han hecho posible este recorrido y reivindicar el papel de los refugios de montaña en la práctica deportiva, el desarrollo del territorio y la protección del espacio natural.
El presidente de la FAM, Javier Franco; el alcalde de Fanlo, en cuyo término se encuentra el refugio, Horacio Palacio; el consejero de Medio Ambiente y Turismo, Manuel Blasco; y el vicepresidente de la Diputación Provincial de Huesca, Ricardo Oliván han intervenido en el acto, destacando todos que este es el resultado del trabajo de muchas personas, para el que ha habido que superar numerosas trabas.
Manuel Pizarro, presidente del Patronato del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido; mandos de la Guardia Civil; alcaldes y concejales de la comarca de Sobrarbe; distintas autoridades y cargos institucionales; miembros de la Junta Directiva de la FAM y montañeros de clubes de Aragón, otras federaciones autonómicas y de Francia han estado también presentes.
ENTREGA DE 50 RECONOCIMIENTOS
Modesto Pascau, muchos años vocal de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Naturaleza de la FAM y expresidente del Patronato del Parque, ha presentado el acto y ha sido el encargado de entregar los 50 reconocimientos con los que la Federación ha querido “aprovechar éste, para nosotros importante y excepcional hecho de hoy, para agradecer a algunos de los que habéis hecho posible este recorrido, después de muchos años de muchas trabas, de mucho trabajo y mucho esfuerzo y hoy de mucha alegría”.
Los promotores de los primeros refugios, los responsables de las obras de Góriz, los guardas que han trabajado desde su inauguración en 1963, los altos cargos y funcionarios de las instituciones públicas que han apoyado en el proceso… han recibido sendos platos de recuerdo.
En su discurso, Modesto Pascau ha destacado “las muchas dificultades y trabas que hemos sorteado. Dentro de unos meses la Federación sacará una publicación donde relatamos con detalle y documentos todas esas vicisitudes desde el primitivo refugio de 1922 de hace pues más de 100 años”.
De la misma manera, ha destacado que los refugios “no solo sirven para practicar nuestro deporte con más seguridad sino también como importante punto de apoyo a la necesaria ganadería extensiva y también a Protección Civil, además de ser imprescindibles en la toma de datos nivometeorológicos” y ha señalado el esfuerzo de la FAM para “llevar una práctica ambiental correcta con los vertidos y desechos” y reivindicar “facilitar que el Parque debe ser un mayor motor económico de Sobrarbe” y retomar con las Administraciones los planes de refugios”.
El propio Modesto Pascau ha recibido también uno de los platos de recuerdo de manos del actual presidente de la FAM, Javier Franco, agradeciendo su destacado papel en todo el proceso de obras. Igualmente, Franco ha subrayado la importancia de los refugios deportiva, social y económica.
Por su parte, el alcalde de Fanlo, Horacio Palacio, ha reivindicado el apoyo de las instituciones a los municipios y la gente que vive en la montaña. El consejero Manuel Blasco, ha destacado la importancia de Góriz para el turismo y el apoyo del Gobierno de Aragón. También, desde la DPH, Ricardo Olivan, ha señalado la contribución realizada y la satisfacción con el resultado de las obras.
LAS OBRAS DE GÓRIZ
Góriz es el refugio de montaña con más ocupación de toda España y también de toda la cordillera pirenaica, superando las 12.000 pernoctaciones anuales; además de resaltar como uno de los principales escaparates de Aragón y una instalación clave para compatibilizar el disfrute turístico y deportivo con la conservación de la naturaleza.
El actual refugio guardado se inauguró en 1963 y los planes para remozar el refugio comenzaron en 2006. Las mejoras realizadas desde entones han incluido la construcción de un punto limpio, la ampliación del edificio para mejorar las habitaciones y servicios, la renovación integral del sistema de depuración y la construcción de aseos y duchas.
La última fase realizada este año ha consistido en la reforma del edificio viejo, sustituyendo completamente el tejado original y remodelando la primera planta y bajo cubierta. La intervención también ha permitido ganar espacio para los visitantes y mantener sus 80 plazas en habitaciones de menor número de camas, además de crear un nuevo alojamiento para los profesionales que prestan su servicio en el Parque Nacional.